Congreso discute el presente y futuro del arbitraje

En un formato pionero, la séptima edición del evento del CAM-CCBC promovió el debate sobre temas como la diversidad, los retos actuales y las tendencias para las próximas décadas

Por Sérgio Siscaro

El VII Congreso de Arbitraje del CAM-CCBC ha hecho historia, abriendo un precedente innovador en eventos en el área de métodos adecuados de resolución de disputas. Esta edición fue pionera en la comunidad arbitral por haber utilizado un formato híbrido, uniendo las características de un evento presencial con las de una transmisión en línea. Entre el 19 y el 20 de octubre, el Congreso discutió temas que impactan directamente en el universo del arbitraje – como la diversidad, las nuevas normas para el ejercicio de la abogacía, la aplicación del método por la administración pública y las tendencias para los próximos años.  De este modo, la iniciativa contribuye una vez más a consolidar en el país la cultura de mecanismos alternativos para la solución de controversias (ADRs, en la sigla en inglés).

El formato innovador, promovido debido al distanciamiento social impuesto por la pandemia de Covid-19, acercó al máximo los participantes de una experiencia presencial. El Congreso se llevó a cabo desde un estudio de grabación profesional y contó con la participación presencial de algunos de los ponentes.  De acuerdo con las directrices de las autoridades de salud pública, todas las medidas de seguridad fueron garantizadas durante el evento. El nuevo formato proporcionó más agilidad y dinamismo al evento, además de permitir un rápido intercambio en línea de contenidos.

“A pesar del largo camino que la comunidad arbitral todavía tiene que atravesar, debemos celebrar las victorias y estar siempre atentos a la mejora técnica y promoción de los debates que generan el desarrollo en los ADRs”, dijo la presidente del CAM-CCBC, Eleonora Coelho. “El VII Congreso CAM-CCBC fue una de esas victorias. Fue un honor promover debates enriquecedores entre árbitros de renombre, abogados y representantes de instituciones arbitrales”, agregó.

Siguiendo la línea de otras ediciones, en las que siempre buscó presentar una amplia gama de puntos de vista, esta edición reunió a un grupo de 22 ponentes – siendo diez de ellos extranjeros. Además, y en consonancia con su constante preocupación por garantizar la diversidad de género, doce de los ponentes eran mujeres. La responsabilidad social que siempre permea las actividades del CAM-CCBC estuvo presente una vez más: el 10% de todos los ingresos derivados de los registros se destinó al Instituto de Conservación y Desarrollo Sostenible de la Amazonía (Idesam). El evento contó con 27 patrocinadores y nueve apoyadores institucionales.

Una mirada hacia el futuro

Uno de los momentos más destacados del VII Congreso fue la clase magna impartida por el árbitro independiente Juan Fernández-Armesto, expresidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) de España y profesor de Derecho Mercantil en la Icade Business School de la Universidad Pontificia Comillas, en Madrid. Participando por vía remota, directamente desde la capital española, Fernández-Armesto delineó las principales tendencias del arbitraje en los próximos 40 años, basándose en el rápido desarrollo del método en las últimas décadas. Para él, el arbitraje deberá mantener su condición de “la principal manera de resolver las disputas internacionales”; después de todo, hoy es ampliamente dominante en el comercio transnacional.

Uno de los aspectos por los cuales el arbitraje deberá cambiar en las próximas décadas es, según él, su percepción por parte de la sociedad en general. La modalidad debe obtener un mayor grado de legitimidad y, para esto, es necesario que se establezcan mecanismos que garanticen el correcto desempeño de los árbitros. Otro punto destacado por él fue la necesidad de establecer estándares más amplios de transparencia y el cambio en la forma en que se nombra a los árbitros.

Para Fernández-Armesto, las grandes oficinas de abogados seguirán siendo los principales players en el mercado arbitral; sin embargo, esta ventaja deberá disminuir debido a la democratización proporcionada por el aumento en la transparencia. Considera que las “oficinas boutique” tienden a ganar espacio en varias industrias, desde la tecnología de la información (TI) hasta el transporte marítimo. Un punto que no deberá cambiar, en la opinión del profesor español, es la necesidad de audiencias presenciales. Para él, sin embargo, los procedimientos deberán ser más ágiles.

Diversidad es la clave

Al elegir la diversidad como uno de los tópicos del VII Congreso de Arbitraje, el CAM-CCBC buscó estimular el debate sobre el tema en el escenario arbitral brasileño e internacional. La assistant case manager Monique Rodrigues do Prado, del CCBC, consideró muy relevante la inclusión del tema. “Información es poder. No podemos ignorar que el CAM-CCBC es una de las instituciones más grandes de ADRs en el mundo. Frente a esto, el Centro no oculta su compromiso de compartir y ampliar sus conocimientos en relación con la práctica de los ADRs. Este compromiso también sirve para acercar la diversidad de género y de raza, ya que incluir este tema en un Congreso cuyo propósito es generar tendencias y también establecer un modelo en el sector arbitral – haciendo que la diversidad se convierta en parte de la política de desarrollo de estas instituciones”.

Para Prado, el CAM-CCBC ha actuado constantemente para cambiar la realidad del mercado, fomentando la participación de las mujeres árbitros, por ejemplo. “Recientemente, el Centro ha estado preocupado por la interseccionalidad de género y raza. Puedo decir que me siento honrada de ser el resultado de esta revisión de la política institucional del CAM-CCBC, porque, como mujer negra, junto de la compañera Haydée Soula, somos excepciones a la regla”, señala. “Me siento feliz de perforar la burbuja del mercado del arbitraje – y, quién sabe, ver mañana otras mujeres negras sintiéndose, como yo, perteneciendo a ese espacio”.

Destaca la calidad de los debates del panel de diversidad, mencionando la participación del árbitro internacional Tafadzwa Pasipanodya, que ha puesto en el orden del día la contribución de los países africanos a la práctica del arbitraje – lo que contribuye a eliminar un cierto sesgo que da centralidad a Europa y a los Estados Unidos. “Esta visión crítica eleva el debate sobre el tema, de manera que invita a todos a revisar cuestiones relacionadas con la diversidad – ya sean étnicas-raciales o de género”, dice. En general, la assistant case manager consideró que la séptima edición del evento fue bastante positiva. “Durante todo el Congreso pude observar que la innovación y la tecnología son pilares del CAM-CCBC, no sólo en términos de infraestructura, sino también en la intensificación de la digitalización de los procedimientos arbitrales”, evalúa.

Pensando “fuera de la caja”

La correcta preparación de un profesional para tratar un arbitraje va más allá de sus conocimientos teóricos sobre el tema en discusión; también debe incluir la mejor manera de actuar en situaciones imprevistas. Con el fin de simular estas condiciones, el VII Congreso incluyó en su programación una actividad lúdica, desarrollada por el grupo NewGen del CAM-CCBC: el Juego de la Improvisación, en el que un participante respondió a las preguntas planteadas por un árbitro. Como la situación se presenta inesperadamente, la actividad permite al participante entrenar las mejores estrategias para hacer frente a circunstancias desafiantes.

Este fue el caso de Inaê Siqueira de Oliveira, abogada de la oficina Ernesto Tzirulnik Advocacia, quien participó en el Juego de Improvisación en esta edición del Congreso con el reconocido árbitro internacional José Ricardo Feris. “¡Me divertí más de lo que esperaba! Fue una actividad innovadora, que sólo conocía por vídeos. El reto es salir de la zona de confort y combinar la capacidad de improvisación que utilizamos en la vida real con el entorno arbitral, que suele ser muy formal”, dice. “La pregunta del árbitro es difícil, expone una fragilidad de su caso y plantea una situación embarazosa para el cliente. Y hay que improvisar en ese momento y contestar, sin denunciar que está en una posición delicada; y eso le lleva a ‘pensar fuera de la caja’.”

Asociada al NewGen, la abogada dice que su experiencia con el VII Congreso fue muy positiva. “Fue la tercera edición que asistí. Me impresionó la forma como el CAM-CCBC fue capaz de acercar la experiencia a un evento presencial en este modelo híbrido. Ayudó a mitigar la ‘fatiga de los webinars’, y mantuvo el alto nivel de calidad del contenido presentado, trayendo una experiencia de debate muy cercana a la de los congresos presenciales”. Para ella, eventos como este, así como actividades de grupos como el NewGen, fortalecen la cultura de ADRs en el mercado brasileño.